lunes, 13 de mayo de 2013

Ivon Estefania Torres Ramos


Metales en el medio ambiente


En la vida cotidiana del hombre se utilizan herramientas y objetos hechos con materiales provenientes de la naturaleza, transformados y utilizados de manera ventajosa. Hoy hablaremos del uso del cobre y su acción en el medio ambiente. El cobre es un metal  con un peso atómico de 63.54 g/mol con numero atómico de 29. Durante años el uso de este ha cambiado en cuanto a su uso y utilidad. En las antiguas civilizaciones era utilizado como decorativo; es decir como accesorios para el cuerpo.  Años más tarde se descubrió que eran elementos de gran resistencia y más útiles como recipientes. También se le dio el uso para comerciar, se intercambiaban por otros productos.

Es aproximadamente 2000 A.C que surge la ya conocida “Edad de bronce”, es aquí donde comienzan a realizarse aleaciones con estaño para la producción de bronce. Después en el siglo XX se utilizaría en la  industria aprovechando aquí  sus propiedades físicas y químicas como conductores de electricidad.  Debido a que el cobre no se corroe, fue utilizado en tuberías ya que protegía contra el desarrollo de bacterias patógenas. También era utilizado como cacerolas ya que sus propiedades ayudaban a la mejor distribución y concentración de calor.  Bien es cierto que el cobre tiene muchas ventajas hoy para el hombre, ya que es resistente a la corrosión, es un buen conductor de electricidad, es maleable y sobre todo reciclable, pero también es un contaminante para el ambiente y para el hombre en grandes cantidades. Los ríos están depositando barro en sus orillas que están contaminados con cobre, debido al vertido de aguas residuales contaminadas del mismo. Las empresas tiran sus desechos ya sea a propósito o accidentalmente en los ríos, muchos animales sufren las consecuencias de estos actos.  En el aire permanece por un largo periodo de tiempo, antes de depositarse en la tierra cuando empieza a llover. Este terminará mayormente en los suelos Cuando el cobre termina en el suelo  es fuertemente impregnado  a la materia orgánica y minerales, lo cual cuando los animales llegan a esta materia orgánica pueden ingerir y terminar con cobre en su organismo y las altas concentraciones de este elemento los llevarían a la muerte. En suelos ricos en cobre sólo un número pequeño de plantas pueden vivir. El cobre puede interrumpir la actividad en el suelo, su influencia negativa en la actividad de microorganismos y lombrices de tierra. La descomposición de la materia orgánica puede disminuir debido a esto.

Como vemos, el uso del cobre tiene repercusiones en el medio ambiente. Pero el hombre solo ve su beneficio a corto plazo en el uso de diversos elementos que la Tierra le ha prestado. ¿Es bueno que el cobre sea reutilizable? Definitivamente no, ya que el uso de este no es del todo positivo. Es el cobre una especie de ciclo interminable de contaminación y peligro para todo ser vivo que se encuentre frente a el. Aunque no es posible desaparecerlo de la Tierra de manera definitiva, se podría hacer un alto a su uso excesivo, ya que si se dejara de producir este elemento por parte de la naturaleza, se crearía un desequilibrio en la vida de ella. Es importante en pequeñas cantidades para las plantas, el hombre y los animales. Pero el hombre debería pensar en alternativas para dejar de utilizar este elemento, siempre y cuando la alternativa no resulte en otro contaminante mas que afecte la vida de la Tierra.

Ivon Estefania Torres Ramos

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